Las pesas, muestran claramente, la decadencia y la estupidez de la raza humana.
Vamos a ver, eruditos del lenguaje, académicos de la RAE, catedráticos de filología hispánica... ¿Cómo algo que se llama"pesas", va a servir, para que "adelgaces"?. ¡Eso es una contradicción de términos!.
Tú te pones una pesa de dos kilos, y amigos... aunque parezca extraño, pesas dos kilos más. Luego para disimular este absurdo invento, se han ideado ejercicios, bailes con pesas, diferentes movimientos... eso con un saquito de arroz, se hace igual, y luego te lo puedes comer. El arroz, no el saquito.
Pero no nos desviemos del tema de las pesas.
Las pesas son como las películas de Disney. Frenan el crecimiento. Lo que pasa es que las películas de Disney, frenan el crecimiento intelectual, y las pesas, el crecimiento físico.
Que hay personas, que veían películas Disney, a la vez que hacían pesas, y han acabado bajitos y torpes.
Y hay otra cosa curiosa del mundo de las pesas. La extravagancia de estos objetos pequeños, y pesados, es que se venden, como en maletas.
Y tú que has ido a comprarte unas pesas, coges la maleta, y no habías pensado en que las pesas, pesaran. Y vas todo el camino, cambiándote la maleta de mano, y con una profunda satisfacción, "seguro que a nadie se le había ocurrido esta táctica antes, y que al cambiarme el peso de brazo, el otro descansará, y ambos quedarán tan fortalecidos y petrificados, como dos donuts que llevan un día fuera de sus envoltorios". Pero no.
Caes en una verdad aplastante, y bochornosa, que le ocurre a todo diestro.
Te das cuenta de que la izquierda es inservible, inútil.
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